Alberto Valdés es un joven agricultor dedicado a la producción de almendras, que llegó de forma inesperada al sector y que ha sabido consolidarse en él pese a las dificultades propias de la actividad. En esta entrevista, repasa sus inicios en el mundo agrario, los beneficios de pertenecer a una cooperativa, su relación con la Administración y lo que puede aportar al sector la Comisión de Jóvenes agricultores impulsada por Federació y a la que pertenece desde su creación.
P: Haznos una breve presentación tuya. ¿Cómo llegaste al mundo de la agricultura?
R: Tengo 38 años, cultivo almendros en Hellín (Albacete), y me incorporé hace seis años a la agricultura. Venía de otro mundo, de la informática. Por cosas de la vida, de la crisis de 2008 que mucha gente como yo nos quedamos sin trabajo, surgió esta oportunidad y me lancé a trabajar a un campo totalmente distinto a lo que estaba acostumbrado.
P: ¿Cómo accediste a la tierra en un primer momento? ¿Era de propiedad familiar o tuviste que comprar/arrendar parcelas?
R: A través de mi familia surgió la posibilidad de arrendar unas tierras. No era nada planeado, realmente, pero era algo que tampoco podía hacer yo sin ayuda familiar por el tema económico y gracias a eso me pude incorporar. Estuve formándome, porque yo venía de no saber nada de todo esto, haciendo un ciclo superior de agricultura, infinidad de cursos, cursos de incorporación de joven agricultor y todo lo que fue posible hasta llegar a poder tener la explotación, y con la ayuda familiar, claro.
P: ¿Cuál es en estos momentos tu vinculación con el sector cooperativo?
R: Yo pertenezco, como socio cooperativista, a Agricoop. Su parte de la almendra pertenece a otra cooperativa, de segundo grado, que es la Unió de Reus. La almendra la comercializamos con Agricoop, pero a través de la Unió.
P: ¿Qué es lo que crees que te aporta, como joven agricultor, el hecho de ser socio de una cooperativa?
R: El pertenecer a una Organización de Productores tan grande como Unió hace que los precios se defiendan mucho mejor que yendo por tu cuenta. Estás más respaldado cuando perteneces a una organización de este tipo. Aparte del tema de comercializar la almendra, en una cooperativa también tienes otros beneficios como la compra de insumos, asesoramiento técnico, e incluso también el acceso a Programas Operativos a la hora de hacer mejoras en tu explotación, ya que tienes más fácil acceder a este tipo de ayudas.
P: ¿Cómo ves las líneas de trabajo seguidas por las Administraciones en materia de apoyo a los jóvenes agricultores?
R: En mi caso, la relación con la Administración siempre ha sido complicada, porque me han rechazado de primeras todas las ayudas que he solicitado, tanto las de incorporación de joven agricultor, como la de acceso a la reserva nacional. De primeras me las han denegado y las he tenido que reclamar, hasta que me las han concedido años después, con lo que eso provoca, porque nosotros tenemos una serie de gastos e inversiones que tenemos que ejecutar y con esas ayudas en principio no podemos contar. De todo lo que te prometen, es llenarse la boca políticamente hablando, porque a la hora de la verdad no se puede contar con ello, sobre todo en tiempo.
P: Entonces, ¿qué crees que podrían mejorar las Administraciones en su relación con los jóvenes agricultores?
R: Algo que se podría mejorar, en la relación que tenemos con las Administraciones, podría ser los plazos. Ellos, cuando te reclaman un documento tienes que tenerlo en ciertos días y si no, estás perdido. Sin embargo, cuando tú reclamas algo, ellos te pueden contestar cuando quieran, o no sabes cuándo van a hacerlo. Esto hace que los plazos se alarguen mucho y que no sepas si vas a poder contar con ello. Esto dificulta mucho a la hora de incorporarse o de hacer algo con tu explotación, algún tipo de mejora.
P: ¿Cómo valoras la creación de la Comisión de Jóvenes de Cooperatives Agro-alimentàries de la Comunitat Valenciana y los pasos que da para proponer iniciativas que impulsen la incorporación de jóvenes al sector?
R: La Comisión es algo positivo para el sector, muy positivo. Principalmente, porque nos va a poner en contacto a una cantidad de jóvenes que en principio es difícil encontrar, visto que el campo es un sector que está muy envejecido. Poner en contacto a la gente joven del sector va a hacer que pongamos en común muchas ideas, veamos otras realidades y cómo funcionan en otros lugares . El intercambio de ideas va a ser muy bueno.
P: ¿Crees que de ese trabajo realizado en el seno de la Comisión van a surgir propuestas que trasladar tanto a las cooperativas como a las Administraciones?
R: Sí, creo que la finalidad de la Comisión de Jóvenes Agricultores va a ser mejorar el sector. Cada uno tenemos una idea distinta a lo que se venía haciendo, en cuanto a cosas como por ejemplo la incorporación de la tecnología y otro tipo de medios al sector agrícola. Creo que nuestra visión va a ser positiva y va a ser buena a la hora de poner en común todas las ideas.
P: ¿Por último, ¿qué consejo darías, desde tu experiencia particular, a una persona que tiene intención de incorporarse al sector o que acaba de hacerlo?
R: El consejo que le daría es que entienda que es un sector que en principio es lento, que tiene una inversión tanto en tiempo como en dinero, pero que con el tiempo puede ser gratificante y te puede dar unos resultados muy positivos. Eres tu propio jefe, trabajas al aire libre y realmente eres dueño de tu futuro. Creo que tiene más cosas positivas que negativas, aunque como en cualquier actividad o negocio que emprendas tienes que trabajar y es sacrificado, pero a la vez muy gratificante.